INGREDIENTES:
Masa quebrada
4 hojas de gelatina
4 hojas de gelatina
400 gramos de queso de untar
300 gramos de mermelada de moras
ELABORACIÓN:
Sin la generosidad de mi amiga Tere, que me regaló una estupenda mermelada de moras casera, este plato no habría sido posible. Hubiera sido una pena, porque es super-fácil y está delicioso.
Vamos allá con la preparación:
Sin la generosidad de mi amiga Tere, que me regaló una estupenda mermelada de moras casera, este plato no habría sido posible. Hubiera sido una pena, porque es super-fácil y está delicioso.
Vamos allá con la preparación:
Si la masa quebrada esta recién hecha, la colocamos en unos moldes pequeños de tartaletas. Introducimos los moldes en la nevera durante media hora, para que endurezca la masa.
Ponemos la gelatina a remojo en agua bien fría. Cuando esté hidratada, la retiramos y la dejamos escurrir.
Ponemos la gelatina a remojo en agua bien fría. Cuando esté hidratada, la retiramos y la dejamos escurrir.
Mientras, calentamos la mermelada de moras. Cuando adquiera temperatura, añadimos las hojas de gelatina y removemos para que se disuelvan bien. Cuando esté bien disuelta la gelatina, la retiramos del fuego y la incorporamos al queso. Mezclamos bien.
Colocamos esta mezcla sobre la masa quebrada.
Horneamos 30 minutos en el horno precalentado a 175 º C.
También podría utilizarse directamente la mezcla sin hornear.
Consumir en pocos días, ya que el queso de untar no se conserva en buen estado durante mucho tiempo.
Consumir en pocos días, ya que el queso de untar no se conserva en buen estado durante mucho tiempo.
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